Receta de kuchen de quesillo

¡Hola a todos! Soy Isabella, la chef detrás de recetasdeamerica.com, y hoy quiero compartir con ustedes una receta que les encantará: el kuchen de quesillo. Este delicioso postre es una versión suave y exquisita de la tradicional preparación del sur de Chile, perfecta para disfrutar en familia. Pero no se preocupen, no voy a revelar todos los detalles de cómo hacerlo, los ingredientes o la preparación en esta introducción. Quiero mantenerlos intrigados y tentados para que sigan leyendo y descubran todos los secretos de esta receta. Así que los invito a seguir leyendo y a disfrutar de esta delicia chilena. ¡No se lo pueden perder!

¿Cómo hacer la Receta de kuchen de quesillo?

Preparar kuchen de quesillo es una receta sencilla y rápida que te encantará. Con una suave y deliciosa combinación de sabores, este postre tradicional del sur de Chile es ideal para compartir en familia. En este artículo te enseñaré paso a paso cómo hacerlo, pero antes, déjame contarte algunos datos interesantes sobre esta delicia. Si quieres disfrutar de un kuchen de quesillo casero y conocer todos los detalles de esta receta, te invito a seguir leyendo. ¡No te lo pierdas!

Ingredientes

• Masa del kuchen
• 500 g de harina sin polvo de hornear
• 125 g de azúcar morena
• 125 ml de leche líquida
• 125 g de mantequilla sin sal en cubitos
• 2 cucharaditas de polvo de hornear
• 1 huevo
• ¼ cucharadita de sal
• Relleno del kuchen
• 400 g de quesillo
• 150 g de azúcar
• 125 ml de crema de leche
• 100 g de pasas
• 3 huevos

Preparación

1. Enciende y precalienta el horno a una temperatura de 200 °C (396°F) durante aproximadamente 10 minutos.
2. En un recipiente grande, combina la harina tamizada, el polvo de hornear y la sal. Revuelve con una cuchara de madera. Agrega la mantequilla y el azúcar, y mezcla hasta obtener una masa homogénea. Reserva.
3. En otro recipiente, bate el huevo y la leche hasta obtener una mezcla consistente. Incorpora la mezcla de mantequilla y forma una masa. Luego, transfiérela a una superficie enharinada y amásala con un rodillo hasta darle forma redondeada.
4. Distribuye la masa en un molde engrasado de aproximadamente 23 centímetros de diámetro. Presiona suavemente con los dedos para cubrir toda la superficie. Corta los bordes sobrantes y resérvalos. Pincha la masa con un tenedor y hornea durante 15 minutos.
5. Separar las claras de las yemas y bátelas a punto de nieve hasta obtener una consistencia cremosa con picos firmes. Reserva.
6. En una licuadora o procesadora de alimentos, combina las yemas, la crema de leche, el azúcar y el quesillo. Mezcla hasta obtener una consistencia densa y homogénea.
7. Vierte la mezcla sobre la masa horneada y distribuye de manera uniforme. Espolvorea las pasas sobre la superficie y utiliza la masa sobrante para crear una decoración en la parte superior, como una rejilla.
8. Vuelve a llevar el molde al horno y hornea por otros 30 minutos, o hasta que esté ligeramente dorado. Retira del horno y deja enfriar a temperatura ambiente. Luego, colócalo en el refrigerador durante al menos 30 minutos antes de servir. Espolvorea con azúcar en polvo.

Recomendación

Para preparar este delicioso postre típico chileno, es importante tener en cuenta algunas recomendaciones. Primero, asegúrate de tener todos los ingredientes a la mano antes de comenzar. La preparación puede tomar alrededor de 60 minutos, así que ten paciencia. Además, debes tener en cuenta que el plato requiere 30 minutos de cocción, así que asegúrate de tener el tiempo suficiente. En cuanto a la nutrición, este postre tiene aproximadamente 300 calorías por porción, por lo que es importante consumirlo con moderación. Por último, recuerda que este plato es rico en vitaminas A, B1, B6, B12 y D, así como en potasio y magnesio. ¡Disfruta de tu postre chileno!

Beneficios

Me encanta esta receta de postre típico chileno. Además de ser deliciosa, tiene beneficios nutricionales que me hacen sentir bien al disfrutarla. Con tan solo 300 calorías por ración, puedo darme un capricho sin preocupaciones. También me sorprende la cantidad de vitaminas que ofrece, como la vitamina A, B1, B6, B12 y D, que son esenciales para mi cuerpo. Además, contiene minerales como el potasio y el magnesio, que ayudan al buen funcionamiento de mi organismo. La preparación puede tomar un poco de tiempo, pero vale la pena cada minuto. ¡Definitivamente recomendaría esta receta a todos!