Receta de queque de limón esponjoso y fácil

¡Hola, soy la chef Isabella! Aquí te traigo una deliciosa receta de queque de limón suave y esponjoso que puedes preparar fácilmente en casa. Este clásico postre es perfecto para disfrutar en cualquier día y ocasión. ¡Vamos a hacerlo!
¿Cómo hacer la receta de queque de limón esponjoso?
Antes de comenzar con los pasos de la receta, déjame darte una visión general de cómo preparar este delicioso postre. Necesitarás ingredientes como harina, leche, azúcar, jugo de limón y huevos. La preparación es sencilla: mezcla los ingredientes, vierte la masa en un molde y hornea hasta que esté dorado. Aquí tienes los detalles completos:
Ingredientes
- 300 g de harina sin polvos de hornear
- 250 ml de leche
- 200 g de azúcar
- 120 ml de jugo de limón natural
- 2 huevos
- 2 cucharadas de mantequilla
- 1 cucharadita de polvos de hornear
- 1 cucharadita de ralladura de limón
Preparación
- En un bol grande, bate los huevos y la mantequilla hasta obtener una mezcla cremosa.
- Añade la leche gradualmente mientras revuelves suavemente a baja velocidad.
- Incorpora la harina y los polvos de hornear previamente cernidos, el jugo de limón y la ralladura de limón. Mezcla hasta integrar todos los ingredientes.
- Vierte la mezcla en un molde previamente engrasado y asienta suavemente golpeando el molde sobre una superficie plana.
- Hornea a 180°C (356°F) durante aproximadamente 40 minutos, o hasta que al insertar un palillo de madera, este salga seco.
- Deja enfriar durante 10 minutos antes de desmoldar.
- Sirve el queque de limón inmediatamente o déjalo enfriar y decora a tu gusto.
Recomendaciones
- Puedes decorar el queque de limón con azúcar flor, merengue o un glaseado de limón para añadir un toque extra de dulzura.
- Sirve el queque mientras esté fresco para disfrutarlo al máximo.
Beneficios
Este queque de limón esponjoso y fácil de hacer es perfecto para satisfacer tu antojo de algo dulce. El limón le da un sabor refrescante y la textura esponjosa lo hace irresistible. Además, esta receta utiliza ingredientes simples que probablemente ya tengas en tu despensa. ¡Disfrútalo como postre o merienda!
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